Pero me gustas así.
Y no por linda, aunque seas lo más bello que he visto.
Me gustas porque en este mundo de princesas, tú quieres ser poeta.
Me gustas porque tú no necesitas destacar para que yo te vea.
Porque mientras todas luchan por cumplir un esterotipo estúpido tú prefieres ser defecto de fábrica. Porque tú no esperas que te amen, tú enseñas a que lo hagan.
Me gustas porque me haces pensar, porque no eres tan frágil como para tener que cuidarte.
Me gustas porque eres piedra y sé que nadie ha logrado ni logrará convertirte en polvo.
Me gustas porque nunca había conocido algo tan extraordinario como tú.
Me gustas mucho ¡loca!
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